Sonrisas y lágrimas ante el Tribunal de la Escuela Diplomática – VII – 2020

Como siempre –es un decir–, la capital nos llama en momentos históricos, de oposiciones por descontado, pero también de pandemia mundial. Una vez más, la convocatoria de 2019 se celebra parcialmente en 2020.

Suerte o desgracia, según el parecer de cada uno, llegamos a tiempo para asistir a los dos últimos días de examen antes del aplazamiento de las pruebas. Volvimos a nuestra base con lo aprendido, lo puesto… y el coronavirus. O al menos eso parece, pues al no vernos afectados por secuelas graves tipo bronquitis o neumonía, no nos sometieron a ningún tipo de test. Como en “Rebelión en la granja”, algunos son más iguales que otros.

La feminización de la diplomacia española ya es un hecho a estas alturas. La Presidenta, la Secretaria, las dos especialistas en idiomas y una invitada constituyen amplia mayoría absoluta frente a un solitario varón invitado.

Desarrollo de las pruebas:

Tras el inalterable ceremonial de las presentaciones llega la Secretaria con los sobres, el/la aspirante los abre, entrega los dobles. Presidenta: “¿Preparada? Leerá sus textos en inglés y francés. Adelante.”

  1. Lectura del resumen en inglés
  2. Lectura del ensayo en inglés
  3. Lectura del resumen en francés
  4. Lectura del ensayo en francés
  5. Disertaciones orales en inglés y en francés
  6. Preguntas en inglés y en francés

El francés, que como saben fue tachado de la lista de idiomas obligatorios en 2015, vuelve a ser requerido este año –para gran regocijo de nuestro amigo y empero diplomático Gauden Villas-, lo que no quita que lo puedan suprimir de nuevo dentro de dos o tres años. Tal es la liviandad de un cuerpo insatisfecho con su génesis y que necesariamente seguirá reinventándola con ahínco hasta cumplir con su deber, siendo la salud mental de los examinandos le cadet de ses soucis.

La parte escrita del ejercicio de idiomas varía notablemente este año: ya no están –pero ¿por cuánto tiempo?– aquellas entrañables traducciones directa e inversa, que se ven sustituidas por resúmenes y ensayos (o comentarios de texto). Decíamos ayer que era “de esperar que el Ministerio publique unas directivas o pautas para ayudar a los preparadores y a los propios estudiantes” en esta nueva prueba. Desafortunadamente, tales precisiones no fueron aportadas, por lo que nos hemos de arreglar como podamos, luego fiarnos de nuestra intuición. Uno de los problemas no deja de ser que las concepciones española, francesa e inglesa de dichos ejercicios no son ni mucho menos las mismas.

Por lo demás, dos horas no son mucho tiempo para 2 ejercicios de esta índole, mas es a lo que hay que adaptarse. Sea como fuere, los examinandos parecen haber asumido el nuevo reto. En efecto, la mayoría de los que vimos lograron producir unos textos dignos: nada es imposible.

Dificultades de los escritos de este año:

En principio, puede ser interesante introducir el ejercicio del resumen en la prueba de idiomas -es más realista en relación con el trabajo diplomático-, pero quedan muchas dudas desde el punto de vista pedagógico. En primer lugar, la extensión del texto original en comparación con la del resumen que se espera de los opositores. Otra cosa es saber a quién va dirigido este hipotético resumen. Si se trata, por ejemplo, de un texto sobre la reforma del Consejo de Seguridad, ¿puede suponerse que el lector destinatario es un profesional que entenderá lo que es el P5 a secas, o es necesario incluir una explicación breve del funcionamiento de dicho organismo? Y es que a priori, no se deberían incluir en un resumen datos que no estén en el texto.

En el caso concreto del resumen de inglés, se trata de un artículo del Economist sobre la utilidad de predecir el futuro. No contiene ningún análisis profundo. Al contrario, es de julio del año pasado y habla de los libros que se pueden leer durante las vacaciones. Una vez rechazados los chick-lit bonkbusters (novelas de mucha tirada y poco valor literario, supuestamente dirigidas a jóvenes del sexo femenino), nos encontramos discutiendo varias formas literarias de entender el futuro. No deja de ser algo extraño en su contenido y lenguaje, pero sigue dentro de lo aceptable: trata de la predicción del porvenir por medio de la literatura. Por otra parte, se nota una diferencia importante entre este texto, de poco más de 600 palabras, y el francés, de casi mil palabras.

En cuanto al ensayo, también se precisaría información sobre su extensión, esto es, el número de palabras que hay que emplear, o su porcentaje con respecto al original, si es posible cuantificarlo.

El texto francés es doblemente sorprendente, no porque sea una opinión publicada en Le Monde, diario oficialista donde los haya y depuis belle lurette, sino en primer lugar porque la forma del artículo está poco cuidada: aunque sean harto conocidas las associations Loi 1901 à but non lucratif, el neologismo lucrativité no lo aceptan la mayoría de diccionarios; aquí se podría hablar de appât du gain lié à la haute rentabilité; pululan anglicismos de toda índole (airbnbisation, gentrification -mejor emplear embourgeoisement o la más reciente boboïsation-, villes métropolitaines –dígase métropoles urbaines-). En cambio, el análisis y la propuesta final son francamente revolucionarios: en aras de un novedoso droit à la ville, los autores proponen que los poderes públicos intervengan a fin de revertir la situación entre pudientes afortunados e infelices insolventes. Pese a su estilo, este libelo merecía especial atención.

Las dos condiciones sine qua non de un buen resumen son ante todo el transcribir todas las informaciones importantes contenidas en el texto, luego el hacerlo con un estilo propio y original. Por ello el resumen debe ser más corto que el comentario. Este último ejercicio ofrece más latitud cuantitativa y cualitativa, pues en él se mencionan las ideas que evoca el texto en los candidatos. Sin apelar a una subjetividad desmedida, cabe mucha autonomía en cuanto al fondo, si bien un parámetro insoslayable no deja de ser el lenguaje diplomático, al que nunca se habría de renunciar.

Tiempo de preparación de los temas orales:

Vamos a pasar a los orales. Extraerá 2 papeles de un saco: son los temas que tratará en inglés y en francés. Se puede elegir el idioma para cada tema, pero hay que decidirse inmediatamente después de haber sacado los papelitos. “Cuando haya acabado de preparar, en un minuto, empezamos. El plazo se cumple a rajatabla. Al final del minuto: “Puede empezar con el inglés”.

Duración de las exposiciones orales:

La duración de cada una de las ponencias es de 5 minutos. “¿Va a sacar su cronómetro? Si no, yo le aviso”, precisión importante, pues no siempre es de recibo el sacar este artilugio; no hace tanto se podía oír entonces un desalentador: “No lo va a necesitar”.

Puede empezar en inglés, luego en francés. Empezamos a contar los 5 minutos.”

Disertaciones orales presenciadas:

¿Es Barcelona la segunda capital española?

¿Es China comunista o capitalista?

Arte rupestre.  (El)

Bullying.  (El)

Ceuta y Melilla.

Elecciones primarias en EE.UU.  (Las)

Estado de derecho.  (El)

Estado del bienestar.  (El)

Estrecho de Ormuz.  (El)

Eurovisión.

Industria de defensa.  (La)

Inmigración ilegal.  (La)

Libertad de expresión y sus límites.  (La)

Medios de comunicación en el siglo XXI.  (Los)

Privacidad y el derecho.  (La)

Realismo mágico.  (El)

Trasplantes de órganos.

Turismo rural.  (El)

Preguntas:

En esta edición, la Presidenta llama a esta fase “una breve entrevista”. Y es que solo las expertas hacen preguntas, llegando a crear cierta relajación en la sala, con sus “Hello, how do you do?”, “Antonio, are you ready?”, “Bonjour !”, “That’s all. Thank you very much” o “Ça va, merci”. Las propias preguntas son poco traumatizantes -algún candidato las calificaría como triviales-, las sonrisas frecuentes, el ambiente desenfadado.

  • Tell us about your trip to London.
  • Vous avez critiqué Facebook et Twitter. Y a-t-il un intérêt à être abonné à ces réseaux sociaux ?
  • Are you a vegetarian?
  • Avez-vous visité la France ? Citez-nous quelques pays qui vous attirent de par le monde.
  • Are you for or against hunting?
  • Aimez-vous cuisiner ?
  • Which are your favourite superheroes?
  • Vous avez donc travaillé à l’Ambassade d’Espagne au Caire. Dans quel contexte ? Avez-vous été dérangée par la vision de femmes voilées ?
  • Would you like to be able to predict the future?
  • Vous venez de dire avoir vécu à Moscou. Que pouvez-vous nous dire des habitudes de vie des Moscovites ? Le style soviétique a-t-il encore cours ?
  • What is your doctorate about?
  • Regardiez-vous beaucoup la télévision étant petit ? Et quelles étaient vos émissions préférées ?
  • Jobs in the future.
  • Parlez-nous de votre voyage à Perros-Guirec (Bretaña)
  • Are you interested in science-fiction?
  • À propos des paysans espagnols et français : pourquoi protestent-ils ?
  • If you become a diplomat and are posted abroad, what sort of challenges do you think that you would face?
  • Parlez-nous des sépharades.

Estaba previsto que los pases duraran media hora, pero de hecho se guardó a los opositores más bien 40 min, llegando a veces a los 45. Los nervios son de rigor en estos exámenes: una candidata hacía ejercicios de relajación del cuello antes de entrar en el aula, otra se abanicaba pese al frío imperante en la sala, si bien supo conservar la serenidad. El talante amable y conciliador del Tribunal ayuda a ello.

Las oposiciones quedan pues aplazadas hasta nueva orden, era de prever frente a la nueva amenaza mundial. Con todo, habrá que acabarlas, y luego celebrar la edición 2020. La vida sigue, prueba de ello es que todavía logramos ver “La fiesta del chivo”, de Saura, no tanto por Vargas Llosa como por este extraordinario actor que es Juan Echanove. También pudimos degustar la soberbia exposición Brueghel en el palacio de Gaviria. Haut les cœurs ! ¡Ánimo otra vez a todas y a todos!

FERNAND MENIER  (con la participación de PETER HARVEY) – mayo de 2020

 

Fernand Menier

Nouvelle mise en abyme